Galletas de queso | Receta fácil

No todas las galletas son dulces y por eso hoy tenemos la receta de las galletas de queso. Una alternativa salada ideal para cualquier reunión y para los pequeños de la casa.

Ingredientes

75 gr. de queso ruyere.
25 gr. de queso Edam. Se pueden usar otros, pero estos son elegidos por ser quesos de sabor intenso.
100 gr. de harina.
100 gr. de mantequilla.
La yema de un huevo.
Pimentón dulce o paprika.
Una pizca de sal.

Cómo hacer galletas de queso

Los ingredientes de esta receta son bastante fáciles de conseguir y en la mayoría de las ocasiones los tenemos en nuestros hogares esperando a ser usados.

En un recipiente lo suficientemente grande mezclaremos la mantequilla añadiendo poco a poco la harina, el pimentón dulce y la sal.
Una vez tengamos una mezcla homogénea, añadiremos la yema de huevo hasta que esté todo bien integrado.
Rallaremos los quesos y los mezclaremos para agregarlos a nuestra preparación y amasar todo hasta que sea una masa uniforme con pequeños trozos de queso.
Cubriremos el recipiente con papel plástico y refrigeraremos durante al menos una hora.
Cuando haya pasado el tiempo podemos precalentar el horno a 180°C. Mientras se calienta, tomaremos porciones de la masa del tamaño que deseemos, haremos bolitas y las aplanaremos hasta que tengan unos 5 milímetros de grosor. No las colocaremos directamente sobre la bandeja sino sobre una lámina de papel para hornear para evitar que se adhieran a la placa. Puedes hacerlas redondas, cuadradas o con forma de triangulitos por ejemplo. Puedes ayudarte de un cuchillo por ejemplo cortando los pedacitos de la masa con la forma que desees.
Hornearemos las galletas durante unos 15 minutos y las retiraremos del horno. Cuando las saquemos, colocaremos un poco de sal por encima y las dejamos reposar.

Podemos utilizar otra combinación de quesos como parmesano y cheddar, pero eso dependerá de nuestros gustos. Estas galletitas son ideales para acompañarlas con algún tipo de dip o salsa para mojar, dulce si las galletas han salido saladas, como una mermelada de tomate o pimientos, guacamole, ketchup, salsa de tomate mexicana etc.